BEIJING, 12 jul (Xinhua) -- El arbitraje sobre el Mar Meridional de China, solicitado unilateralmente por Filipinas, es una farsa política realizada bajo el pretexto de la ley, indicó hoy el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi.
Wang hizo las declaraciones después de que un tribunal de arbitraje que abordó el caso de arbitraje sobre el Mar Meridional de China emitió hoy su fallo final.
"El arbitraje sobre el Mar Meridional de China es por completo una farsa política preparada bajo pretextos legales. Se debe exponer su naturaleza para que todos la vean", dijo Wang.
Confabulado y manipulado por ciertas fuerzas ajenas a la región, el ex gobierno de Filipinas inició de forma unilateral el arbitraje sin el consentimiento de la otra parte, a?adió.
"Tal acto va en contra del acuerdo alcanzado con anterioridad entre las dos partes para resolver las disputas mediante la negociación y consultas bilaterales. También viola el compromiso asumido por Filipinas en la Declaración sobre la Conducta de las Partes en el Mar Meridional de China (DOC)", dijo el canciller chino.
Es claro que su propósito no es buscar una adecuada solución de las disputas con China, sino violar la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos de China, poniendo en riesgo la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China, se?aló.
El arbitraje fue realizado conforme a un procedimiento y una aplicación de la ley injustificados y se basó en evidencias y hechos fallidos. Así como está nunca será aceptado por el pueblo chino, ni será reconocido por nadie en el mundo que esté del lado de la justicia, dijo Wang.
Wang se?aló que la posición de China de no aceptar ni participar está encaminada a defender el Estado de derecho internacional y las reglas de la región.
De acuerdo con el derecho internacional, todos los países tienen el derecho de elegir por su voluntad los medios de solución de disputas.
La Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar otorga a los Estados partes el derecho de excluir las disputas pertinentes de la aplicación de procedimientos obligatorios de solución de disputas.
El DOC firmado por China y los diez países de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (Asean, por sus siglas en inglés) estipula claramente que las disputas pertinentes las deben resolver los países directamente involucrados mediante el diálogo y las negociaciones.
"La no aceptación y la no participación de China en el arbitraje se basan con firmeza en el derecho internacional y concuerdan con las normas y reglas del derecho internacional del mar. China está actuando en estricto apego a la ley", dijo Wang.
El fallo emitido por el Tribunal de Arbitraje viola los derechos legítimos de China; desafía las normas del derecho internacional, incluyendo el respeto a la soberanía y la integridad territorial; socava la santidad e integridad del sistema de derecho internacional del mar; y tiene un efecto negativo sobre las reglas de la región establecidas con base en el DOC, a?adió el canciller.
El establecimiento del tribunal de arbitraje no tiene legitimidad y el tribunal no tiene jurisdicción sobre el caso. El fallo proviene claramente de los actos de autoexpansión de las facultades del tribunal de arbitraje y va más allá de sus facultades por lo que no tiene efecto legal, enfatizó.
Wang se?aló que cada vez más países del mundo, así como personas con visión, han expresado su preocupación y dudas por el caso, especialmente los expertos legales de todo el mundo.
Más de 60 países han expresado públicamente su entendimiento y apoyo a la posición de China.
"Estas son voces de justicia que la comunidad internacional debería escuchar bien", dijo.
La soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos de China en el Mar Meridional de China están basados en evidencias históricas y legales sólidas y no resultarán afectados por el fallo del tribunal de arbitraje, enfatizó Wang.
En la declaración emitida hoy por el gobierno chino, se reafirmaron una vez más la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos de China en el Mar Meridional de China.
Estos incluyen, entre otras cosas que China tiene soberanía sobre Nanhai Zhudao (islas del Mar Meridional de China); que China tiene aguas internas, mar territorial, zona contigua, zona económica exclusiva y plataforma continental basadas en su soberanía sobre Nanhai Zhudao; y que China tiene derechos históricos en el Mar Meridional de China, según Wang.
El canciller enfatizó que la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos de China en el Mar Meridional de China no son reclamos nuevos.
Estos, incluyendo la línea punteada, se han formado en el largo transcurso de la historia y han sido defendidos por los sucesivos gobiernos chinos, a?adió.
"Cualquier intento por parte de cualquier fuerza para socavar o negar de cualquier forma la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos será inútil y fracasará", dijo.
En cuanto a la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos, China no aceptará ninguna forma de solución de disputas por terceros sin otorgar primero su consentimiento ni aceptará ninguna solución impuesta.
Este tribunal provisional, injusto y muy controvertido, no defiende el derecho internacional ni el Estado de derecho, la justicia y la equidad en el mundo, dijo Wang.
El canciller a?adió que China seguirá comprometida con la solución pacífica de las disputas a través de las consultas y la negociación y seguirá trabajando por la paz y la estabilidad en esta región.
China contribuye al orden mundial y a la paz regional, dijo Wang, quien a?adió que China seguirá comprometida con la solución pacífica de las disputas con las partes directamente involucradas mediante la negociación y las consultas y conforme al derecho internacional.
China está comprometida con defender la libertad de navegación y sobrevuelo de la que gozan todos los demás países conforme al derecho internacional, dijo Wang.
El canciller se?aló que China también está comprometida con la implementación plena y eficaz de la DOC y seguirá trabajando para impulsar las consultas sobre un Código de Conducta en el marco de la DOC.
El arbitraje y la dramatización y manipulación política de mala fe han puesto en peligro la cuestión del Mar Meridional de China, con creciente tensión y confrontación, dijo Wang.
Será perjudicial para la paz y la estabilidad en la región y no favorece los intereses comunes de China y Filipinas, de los países de la región o de la comunidad internacional en general, se?aló.
"Ahora que la farsa acabó, es momento de que las cosas regresen a la normalidad", dijo Wang.
China ha tomado nota de las más recientes declaraciones del nuevo gobierno de Filipinas, incluyendo su disposición a volver entablar consultas y diálogo con China sobre el asunto del Mar Meridional de China.
China espera que la buena voluntad del nuevo gobierno filipino para mejorar las relaciones con China esté acompa?ada de acciones reales y que la parte filipina trabaje con China para abordar de forma adecuada las diferencias y para llevar pronto las relaciones chino-filipinas de nuevo al camino del desarrollo saludable, dijo Wang.
El ministro reiteró que el compromiso de largo plazo de China es cultivar la buena vecindad y las relaciones amistosas con sus vecinos.
China tiene la responsabilidad internacional de defender la paz y la estabilidad en esta región y se mantendrá firme en su decisión estratégica de perseguir un desarrollo pacífico, a?adió.
China seguirá haciendo lo que pueda para salvaguardar los propósitos de la Carta de Naciones Unidas y las normas básicas que rigen las relaciones internacionales, para defender el Estado de derecho internacional y la justicia y equidad en el mundo y para promover la paz y el desarrollo de la humanidad, dijo el canciller chino.